Quintana plantea crear escuela antiimperialista para jóvenes

El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, planteó a las autoridades de Riberalta crear “una escuela Antiimperialista Amazónica para los jóvenes” con el fin de conservar la soberanía y dignidad de Bolivia.



La propuesta la realizó durante la presentación del libro Bolivia Leaks: la injerencia política de Estados Unidos contra el proceso de Cambio (2006-2010), en el municipio de Riberalta, departamento de Beni.

En el acto realizado el viernes, Quintana recordó que para contrarrestar la arremetida del imperio norteamericano, se fundó el 17 de agosto, en Warnes, Santa Cruz, la Escuela de Comando Antiimperialista para las Fuerzas Armadas.

La Escuela tiene entre sus objetivos principales construir una doctrina que estará basada en la lucha política e ideológica contra el capitalismo, imperialismo y colonialismo, y también la defensa de la soberanía de la Patria Grande, asechada por Estados Unidos.

De esa situación da testimonio el libro BoliviaLeaks, coordinado por el ministro Quintana, y elaborado por los investigadores, Iván Mérida, Jésica Suárez, Fernando Torres y Loreta Tellería a partir de los cables oficiales de la Embajada de Estados Unidos, que confirman la injerencia y conspiración contra el proceso de cambio.

Quintana señaló en el acto en Riberalta que Bolivia fue víctima del castigo del imperialismo porque decidió de manera soberana cambiar su calidad de vida y revelarse ante Estados Unidos.
Por ello, la Embajada estadounidense patrocinó el golpe cívico prefectural en 2008. “Quien estaba impulsando la caída del presidente Evo en la media luna, era la Embajada de Estados Unidos”, afirmó el Ministro.

Sin embargo, esa legación diplomática negó cualquier participación en las acciones que venían desde las prefecturas de Santa Cruz, Tarija, Pando, Beni y Chuquisaca.

Durante las jornadas del golpe entre 2007 y 2008, las acciones de las autoridades de los departamentos que conformaban la denominada media luna, se caracterizaron por generar gran oposición regional al gobierno de Morales, incluso fueron tomadas las oficinas de algunas instituciones en Santa Cruz y en Pando donde sucedió la masacre de Porvenir, en la que campesinos fueron asesinados por hordas golpistas azuzadas y organizadas por el entonces prefecto departamental, Leopoldo Fernández, hoy con detención domiciliaria.
Precisamente, el titular de la Presidencia explicó que se logró parar el golpe mediante la detención de Fernández, quien recibía el apoyo del entonces prefecto de Cochabamba, Manfred Reyes Villa; de Tarija, Mario Cossío; de Beni, Ernesto Suárez y de Santa Cruz, Rubén Costas.

Pero también se logró desbaratar esa aventura golpista cuando el Jefe de Estado expulsó del país al embajador norteamericano Philip Goldberg, quien mantenía periódicas reuniones con estas autoridades regionales.

“Este libro está narrando ese golpe”, dijo.

Explicó que quien financia ese tipo de movimientos para destruir gobiernos progresistas que se apartan de las políticas norteamericanas, es precisamente Estados Unidos.
“¿Quiénes organizan los golpes? es el imperio”, insistió el ministro Quintana.