El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, aseguró ayer que existe una campaña contra el presidente Evo Morales que no sólo se limita al referendo constitucional, sino que genera una desestabilización en Bolivia para afectar las relaciones económicas con potencias emergentes como China y Rusia.
Esas fueron las primeras declaraciones de Quintana después de cuatro días de silencio tras la detención de Gabriela Zapata, la exnovia del presidente Evo Morales, a quien el Ministro aseguró no conocerla pese a que la exejecutiva de Camce operó desde las oficinas de ese Ministerio.
El fiscal general, Ramiro Guerrero, indicó que Zapata ingresó 40 veces al Ministerio de la Presidencia, donde hacía “negocios”. Dos funcionarios de Quintana están aprehendidos por complicidad con Zapata.
El Ministro propuso crear una agencia de inteligencia ante la carencia de una institución que proteja la seguridad del Estado.
Dijo que en ese ámbito el Estado está en “pañales” y que no se debe olvidar el origen de la denuncia del supuesto tráfico de influencias (Carlos Valverde).
Quintana dijo que existe un interés geopolítico en la denuncia que hizo Carlos Valverde sobre un supuesto tráfico de influencias de Gabriela Zapata Montaño en beneficio de la empresa china Camce por la relación que tuvo con el presidente Evo Morales, en 2007.
“Hay un interés geopolítico y estratégico, esencial que lo que pretende es disminuir la intensidad de la relación entre Bolivia, China, Rusia a partir de los proyectos que estamos desarrollando en Bolivia que apuntan a convertir al país en un Estado fuerte”, dijo en una entrevista en la emisora estatal Patria Nueva.
Aseguró que los líderes opositores, a los que calificó de antipatrias, antinacionalistas y de estar involucrados con el narcotráfico, son la punta de lanza del imperio para desestabilizar el proceso de cambio que lleva adelante el Gobierno.
“En este gran proyecto de liberación de los pueblos de América Latina frente a la pérdida de poder de hegemonía de influencia de los Estados Unidos, qué papel ha adquirido Bolivia en esta correlación de fuerzas internacionales, frente a la disputa con Chile en La Haya y qué está detrás de este juego perverso siniestro que se está jugando hoy día a partir de estas denuncias inconsistentes”, señaló.
Quintana reiteró que con el ataque en contra de Morales se busca debilitar la integración económica que logró Bolivia con China a partir de los proyectos que se implementan en áreas de hidrocarburos, infraestructura física, desarrollo tecnológico, entre otros.
“En esta relación vemos a un gran perdedor y se llama Estados Unidos, la potencia hegemónica que durante 100 años gobernó la relación con América Latina (…) Estados Unidos tiene menos poder, menos inversión en América Latina frente a la emergencia de la China”.
Agencia de inteligencia
En ese contexto, el Ministro de la Presidencia aseguró que para evitar y prevenir este tipo de ataque contra los gobernantes el Ejecutivo requiere de una “agencia de inteligencia estatal” y anticiparse a “un golpe blando”, al que se enfrenta Morales.
“El Estado Plurinacional carece de instituciones de inteligencia estatal capaces de proteger la propia seguridad, si hay un renglón pendiente en la construcción del Estado Plurinacional es su capacidad de autodefensa, este es un caso que nos va a obligar por responsabilidad gubernamental y estatal a construir una verdadera agencia”, dijo.
Agregó que esta instancia de inteligencia permitirá “prevenir este tipo de ataques alevosos, rabiosos que ya sabemos de dónde procede”.
CHOQUE Y ZAPATA HACÍAN “NEGOCIOS TURBIOS”
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, admitió que desde el año pasado se indagaba sobre algunas irregularidades que realizaba Gabriela Zapata aprovechando la “estrecha relación” de amistad que tenía con la jefa de la Unidad de Gestión Social, Cristina Choque.
Indicó que el proceso de investigación se inició a fines del pasado año para esclarecer la responsabilidad de Choque, y su relación con Zapata debido a que en esa instancia se realizaban reuniones de naturaleza privada.
“Efectivamente la señora Cristina Choque en su relación con Gabriela Zapata estaba haciendo cosas que eran condenables (…)No nos tiembla la mano para también imputar a otros funcionarios que han tenido relaciones dudosas, que han utilizado instalaciones cuya jefa de unidad era Cristina Choque y que en complicidad con la señora Zapata hacían ‘negocios turbios’”, aseveró.
Quintana dijo que “no conoce de forma física a Zapata”, pero que sí existe una relación entre Choque y el Ministerio de la Presidencia.
JIMMY MORALES GUARDA DETENCIÓN
Fiscalía imputa a Choque y analiza otras citaciones
El Ministerio Público imputó ayer a la exjefa de la Unidad de Gestión Social del Ministerio de la Presidencia, Pastora Cristina Choque Espinoza, por el delito de legitimación de ganancias ilícitas, tráfico de influencias y uso indebido de bienes del Estado. Se estableció vínculos en las actividades que desarrollaba Gabriela Zapata Montaño, exgerenta comercial de la china Camce.
La exfuncionaria del Ministerio de la Presidencia será sometida hoy a medidas cautelares desde las 08:50.
El chofer
Ayer en la tarde, Jimmy Morales, también sindicado de haber participado en los supuestos hechos irregulares en las que incurrió Gabriela Zapata, se presentó se forma voluntaria a la Fiscalía.
“Estoy viniendo a hablar y a declarar toda la verdad, me están inculpando en los bienes que haya podido manejar. Yo estoy a cargo de almacenes de donaciones y también he sido conductor, pero he hecho el cargo de conductor cuando me lo pedían por órdenes superiores. Lleve a la señora Zapata conjuntamente con Cristina Choque, pero seguramente iban a algún restaurante porque lo hice a mediodía. Recibí y deposité dinero de la señora Zapata el año pasado, 30 mil dólares, me pidió que le haga ese favor de depositar a la cuenta de ella”, dijo antes de ingresar a declarar.
Por su parte, el fiscal general del Estado, Ramiro Guerrero, reveló que Zapata, “ingresaba como si fuera suya” a las oficinas del Ministerio de la Presidencia y que el anticrético de la vivienda en que habitaba era de 260 mil dólares y no 100 mil como se indicó.
De acuerdo con el informe presentado, Zapata se habría apersonado a esas instalaciones por más de 40 veces, sin embargo, habría visitado esas oficinas desde el 2011.
Dijo que se hacía pasar como funcionaria de esa oficina. “Vamos a convocar a los guardias de seguridad, vamos a pedir el cuaderno de control, toda la información que se tenga, entendemos que no hay cámaras ahí”, señaló.
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