El ministro de Trabajo, Héctor Hinojosa, desestimó ayer un posible ajuste de la planilla salarial en las industrias como consecuencia del incremento de tarifas hasta en 48% para el gas natural y 3% para la electricidad. Minimizó el impacto en el sector industrial, que en su criterio registra una importante rentabilidad.
RENTABILIDAD
“En el caso de la tarifa del gas se ha levantado una subvención para ciertos sectores de la industria, que en primer lugar tiene altos niveles de rentabilidad y de utilidad y que por tanto no tendrá incidencia en sus costos, que precisamente incluye el empleo. Por esta razón no se trata de algo que ponga en riesgo la estabilidad laboral”, aseguró tras participar de la reunión de gabinete en Palacio.
El titular de Trabajo dijo que el Ministerio de Hidrocarburos, Luis Sánchez, demostró que con los ajustes tarifarios, las industrias seguirán generando ganancias y rentabilidad. “Hemos explicado a los trabajadores y seguiremos explicando que se trata de que el precio del gas no tenga un efecto en el conjunto mayoritario de la población” señaló.
ELECTRICIDAD
En cuanto al incremento del 3% en la tarifa de consumo de electricidad, Hinojosa hizo una comparación con el aumento del precio de Coca Cola en un boliviano. “Ha subido en un boliviano en cada botella, frente al precio de la mayoría de tarifas que ha aumentado en 90 centavos al mes, por tanto no hay incidencia igual a la Coca Cola,” dijo.
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