Bolivia se convierte en país consumista señaló el viceministro de la Micro y Pequeña Empresa, Saturnino Ramos, quien hizo declaraciones al respecto en la rendición de cuentas del Ministerio de Desarrollo Productivo; el mismo que se realizó la semana pasada en la sede de Gobierno.
La autoridad en su informe indicó que alrededor de 80% de la población está vinculada a la micro y pequeña empresa, y es por ello que se busca desarrollar este sector con políticas públicas que ayuden a salir a las empresas de la estrechez del mercado interno.
GRAN EMPRESA
De acuerdo con datos oficiales, la gran empresa abarca apenas 1% de la base productiva de Bolivia, mientras que la mediana tiene 5%, casi 7% la pequeña y 90% es emprendimiento unifamiliar, personal, en el ámbito de la micro y pequeña empresa.
Ramos dijo que del mencionado 90%, se desprende que 10% es formal, y que de este porcentaje, de acuerdo con un análisis realizado, 8% es la pequeña y micro empresa. Cifras complementarias ofrecidas por la autoridad indicaron que 43% ocupa la actividad comercial, 26% son servicios y 31% corresponde a manufactura y transformación.
La sumatoria de servicios y comercio nos muestra a Bolivia como un país consumista –apuntó la autoridad– y lamentó que las instancias competentes tengan ciertas debilidades en consolidar normas y ejecutar sus acciones en revertir tal situación, y apuntó al contrabando que también afecta al sector productivo del país.
También mencionó que los procesos de privatización así como de capitalización, enajenaron las empresas del Estado, generó un nuevo actor económico, los pequeños emprendimientos esporádicos, que de acuerdo a la coyuntura o época cambiaron de actividad económica
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